SIGUEN AUMENTANDO LOS DETENIDOS TRAS EL INTENTO FALLIDO DE GOLPE DE ESTADO
La policía turca ha detenido a Muhammet Sait Gülen, sobrino del predicador Fethullah Gülen que reside en Estados Unidos y al que Ankara acusa de ser el cerebro del fallido golpe militar del 15 de julio.
Muhammed Sait Gülen fue arrestado en Erzurum, ciudad en el noreste de Anatolia, y enviado a la capital, Ankara, para ser interrogado, bajo sospecha de estar vinculado a los responsables del golpe, informa la agencia semipública turca Anadolu.
Su arresto fue decretado por la Fiscalía tras comprobarse que el sospechoso también podría estar involucrado en una supuesta filtración de preguntas de un examen de funcionarios en 2010.
La Fiscalía investiga si las redes vinculadas a la cofradía de Gülen filtraron a sus asociados o simpatizantes las preguntas de este examen, conocido como KPSS, que es necesario para acceder a la carrera del funcionariado y suscita cada año enorme expectación en Turquía.
Según informa el diario Hürriyet, también se investiga ahora la puntuación alcanzada en ese examen por los cónyuges y familiares de los supuestos golpistas detenidos.
Periodistas turcos han denunciado en el pasado la intención de la cofradía gülenista de colocar a sus allegados en puestos clave de la Administración pública, aparentemente con el respaldo tácito del Gobierno hasta 2013, fecha en la que estalló una lucha de poder entre las redes de Fethullah Gülen y el Gobierno.
La semana entrante, el ministro de Exteriores, Mevlüt Çavusoglu, y el de Justicia, Bekir Bozdag, viajarán a Estados Unidos, a cuyas autoridades intentarán convencer para que extraditen al predicador, quién ha negado toda relación con el golpe militar.
La Presidencia turca también ha informado de la detención de Halis Hanci, considerado la 'mano derecha' del clérigo Fetulá Gulen, al que las autoridades atribuyen el fallido golpe de Estado del pasado 15 de julio.
Hanci habría entrado en Turquía dos días antes de la asonada militar, según ha explicado un portavoz del presidente Recep Tayyip Erdogan en declaraciones a la prensa. Por otra parte, el primer ministro turco, Binali Yildirim, ha asegurado que no está prevista la prórroga del estado de emergencia de tres meses decretada tras el intento de golpe de Estado, aunque ha advertido de que se alargará si es necesario.
"Nuestro objetivo es que no se debe ampliar, pero si hay necesidad es evidente que se prorrogará", ha afirmado Yildirim en una entrevista con la cadena de televisión ATV.