A DIFERENCIA DE OTROS ESTADOS
La única clínica que practica abortos en todo Misuri estuvo a punto de perder su licencia debido a la libertad de cada estado del país para regular esta práctica. No obstante, un tribunal del estado ha paralizado temporalmente el cierre de la clínica.
Misuri es un estado cargado de restricciones para interrumpir el embarazo. Abortar en ese estado conservador implica esperar un mínimo de 72 horas desde la primera visita a la clínica hasta el día del aborto. Además, las mujeres deben someterse a dos exámenes pélvicos y recibir un folleto redactado por el estado para disuadir a las mujeres de interrumpir el embarazo.
Esas normas, que el director médico de la única clínica abortista de Misuri, David Eisenberg, considera "exageradas", han provocado el cierre de cuatro clínicas en Misuri desde 2008. Ahora, sólo queda una opción, el centro de San Luis.
El río Misisipi separa la situación restrictiva de Misuri de la libertad total que brinda Illinois. En este estado hay más de 40 clínicas que facilitan la irrupción del embarazo. En una de ellas, la clínica Hope, las paredes están decoradas con lemas como "el aborto es normal".
Un mensaje que repele a los 24 territorios que, en los últimos años, han aprobado normativas para restringir el acceso al aborto.
"La clínica Hope tiene muchas más libertades para operar de una forma basada en las pruebas, en los datos, en la ciencia, sin estar excesivamente regulada por el estado, porque Illinois reconoce que el aborto es un servicio de salud básico", afirma David Eisenberg.
"En Illinois, se accede al aborto de la misma manera que a cualquier otro servicio de salud", asegura Erin King, directora ejecutiva del centro de Illinois. Las pacientes solo deben hacerse un análisis de sangre y un ultrasonido, después reciben asesoramiento y abortan.
Por eso, según afirma King, "el 55% de los pacientes que recibe la clínica Hope provienen de Misuri", una cifra que ha aumentado en los últimos dos años.
Si están en sus primeras semanas, muchas mujeres abortan con una píldora, una opción que ha desaparecido en Misuri.
Illinois cubre el coste del aborto para personas de bajos ingresos, mientras que en Misuri, todas las pacientes tienen que pagar el coste íntegro del procedimiento, que puede ascender a 1.300 euros.
A diferencia de la prohibición del aborto a partir de agosto en casi todos los casos en Misuri, en Illinois, el Congreso estatal ha aprobado una ley que garantizaría el acceso al aborto si el Tribunal Supremo deroga la legalización de ese derecho en Estados Unidos.
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