TRAS EL DERRUMBE DE UNA GALERÍA
Los tres mineros que no pudieron ser rescatados el pasado 5 de febrero tras el derrumbe de una galería en la mina de Sudáfrica en la que trabajaban cumplen este viernes dos semanas bajo tierra sin que se hayan producido avances en las labores de rescate.
Dos mujeres y un hombre permanecen dentro del contenedor en el que se encontraban cuando se produjo el accidente, tras el que los equipos de emergencias lograron rescatar en vida y llevar a la superficie a más de 80 mineros.
Después de varios días en que los efectivos de salvamento se acercaban al contenedor, las labores de rescate se suspendieron indefinidamente este lunes al producirse nuevos colapsos en esta mina de oro, situada en la provincia nororiental de Mpumalanga.
El ministro de Recursos Minerales, Mosebenzi Zwane, anunció esta semana que las operaciones de rescate podrían tardar hasta tres semanas en volver a comenzar.
Para que los equipos de emergencias vuelvan a la zona, una máquina perforadora deberá abrir espacio "a través de roca dura", explicó el ministro, que no descarta utilizar métodos alternativos para llegar hasta el contenedor.
Pese a las complicaciones de los últimos días, el presidente sudafricano pidió esta semana al país que no abandone la esperanza e hizo un llamamiento a sus compatriotas para que recen por los mineros atrapados y sus familias.
"Deseamos a los equipos de rescate toda la fuerza y la sabiduría posible mientras ejecutan esta difícil tarea", dijo el presidente en el Parlamento.
Mientras tanto, tanto el Gobierno como la empresa propietaria de la explotación han ofrecido a las familias de los tres siniestrados ayuda económica y apoyo psicológico.