EN UN BARRIO CRISTIANO DE LA CIUDAD
Al menos trece personas han fallecido y unas treinta han resultado heridas por la explosión de un coche bomba en el centro de Damasco.
La detonación del artefacto, colocado en los bajos del vehículo, se produjo a una distancia muy próxima de una comisaría de policía de un barrio cristiano.
Tras la deflagración, todos los accesos a la zona fueron cerrados por las fuerzas de seguridad. El atentado ha coincidido con la reunión que hoy han mantenido el enviado de Naciones Unidas, Lajadar Brahimi, y el presidente sirio Bashar Al Assad.
Brahimi ha visitado Damasco para plantear un tregua entre el régimen y los rebeldes de cara a la fiesta musulmana del sacrificio que comienza la semana que viene.
Todo son buenas intenciones, aunque no es la primera vez que se lleva a cabo la misma reunión ni tampoco es la primera vez que el gobierno sirio trata de pactar una posible paz que se resiste tras 18 meses de guerra en siria.