Reino Unido
Los menores, de ocho y seis años, están al cuidado de su abuela después de que sus padres fallecieran con un mes de diferencia.
Una pareja ha muerto con cuatro semanas de diferencia en Birmingham, Reino Unido, dejando atrás a sus dos hijos en una tragedia "incomprensible". Amie Walton, estaba luchando contra el cáncer de hígado e intestino en el Hospital Hospital Good Hope, cuando se despertó tras haber sido intervenida descubrio que su pareja, Chris Mills, había muerto repentinamente de una úlcera estomacal mientras pasaba la noche en el hospital con ella.
A la madre le habían diagnosticado cáncer en etapa 4 después de visitar a su médico de cabecera por acidez estomacal persistente. A pesar de recibir tratamiento para su cáncer, en mayo de este año le dijeron que se había propagado, en ese momento tenía 50 tumores en cada pulmón, según revela The Mirror.
Después del diagnóstico terminal, se informó a la familia que la esperanza estaba puesta en un tipo de radioterapia que no estaba disponible en ese hospital, por lo que lanzaron una campaña para recaudar las 35.000 libras esterlinas necesarias para obtener el dinero. Sin embargo, no pudieron hacer nada por salvarle la vida.
La mujer falleció el pasado 18 de agosto, cuatro semanas después de la muerte del marido. La pareja Kingstanding deja atrás a su hijo Harry, de ocho años, y a su hija Mia, de seis años. Los niños están bajo el cuidado de la madre de Amie, Tracey.
Ahora, un comerciante local, Bal Singh, ha creado una recaudación de fondos para los niños después de que perdieron a ambos padres. "Estábamos todos ocupados concentrándonos en ayudar a Amie a superar su enfermedad y preparándonos para lo que se avecinaba cuando tuvimos la gran conmoción de que Chris falleciera inesperadamente. Amie fue muy valiente y se fortaleció para superarlo, por lo que estaba muy orgullosa de ella", explica la abuela de los niños.
"Harry y Mia tienen un lugar especial en nuestros corazones. Perder a un padre a una edad tan joven y tierna es doloroso, pero perder a ambos es más que devastador", asegura el comerciante.