Estados Unidos
Putin ha reforzado la presencia de sus tropas cerca de las fronteras de Ucrania y Georgia con unos 100.000 soldados.
Rusia está realizando maniobras militares cerca de las fronteras de Ucrania y de Georgia y, en estos dos últimos meses, Putin ha reforzado la presencia de sus tropas en esa zona con cerca de 100.000 soldados. Algo que inquieta a la comunidad internacional.
Las demandas de ambos bloques son, por ahora, incompatibles y amenazan con que la situación se podría tensar más todavía. Rusia pide que no se permita a Ucrania el acceso a la OTAN y advierte de que siguen valorando acciones militares. De la misma manera, Rusia quiere aprovechar la tensión que ha provocado con sus maniobras en la frontera con Ucrania para negociar con la OTAN desde una posición de fuerza.
El propio Putin ha dicho en bastantes ocasiones que considera a Rusia y a Ucrania como un solo pueblo. Esa es la línea roja por la que Putin estaría dispuesto a ir a la guerra. Debido a todo esto, Ucrania tiene solo dos soluciones: o comportarse de manera neutral o estar con Rusia.
Estados Unidos rechaza las exigencias de Rusia
Por su parte, Estados Unidos rechaza las exigencias de Rusia y asegura que las puertas de la OTAN seguirán abiertas para Ucrania y el resto de países del este de Europa. Además, aseguran que la prioridad es el dialogo, aunque también se preparan para una posible escalada militar.
La administración Biden está dispuesta a negociar cualquier aspecto, excepto la prioridad rusa de garantías de que la OTAN expanda a su alrededor y advierte de que si Rusia da un paso militar al frente, Estados Unidos no darÁ un paso al lado, se producirían sanciones económicas nunca vistas hasta ahora y se armaría a una guerrilla en Ucrania. El mensaje de la Casa Blanca es que "hasta donde está dispuesto a llegar Biden depende de hasta donde esté dispuesto a llegar Putin".