REINO UNIDO
El pequeño Ellis ilumina la habitación con su tierna sonrisa apenas unas horas después de haber sido sometido a una cirugía en el corazón que le ha cambiado la vida.
Ellis nació seis semanas antes de lo esperado y desde el inicio tuvo que luchar por su vida. Los médicos hallaron líquido en sus pulmones y una ecografía reveló que tenía un defecto septal centricular, una deformación en la pared que divide los ventrículos izquierdo y derecho del corazón, por lo que debía ser intervenido quirúrgicamente.
Su madre, Stephanie, recuerda al diario Mirror que nada podía prepararles para lo que se iban a enfrentar en adelante. "Al ser prematuro, era demasiado pequeño para la operación, así que tuvimos que esperar tres meses hasta la operación que le cambió la vida", explica.
El pequeño pasó seis días ingresado en el Hospital General de Southampton y ahora tiene que volver para someterse a chequeos.
"Es un guerrero con un corazón sano", afirma su madre, que luce feliz en una fotografía facilitada por la British Heart Foundation con el pequeño Ellis.