COVID-19
Un cribado masivo en el mayor distrito de Pekín ha provocado que los residentes de la capital china se aprovisionaran de víveres, al temer que se imponga un confinamiento similar al de Shanghái.
La capital china hace tests de COVID-19 a sus 21 millones de habitantes. El cribado masivo comenzó en el barrio de Chaoyang, donde los vecinos hicieron interminables colas para someterse a una prueba PCR. Once distritos más, prácticamente el resto de los pekineses, se han sumado a los tests de coronavirus.
El cribado en Chaoyang provocó escenas de pánico en los supermercados. Los residentes llenaron carros enteros de comida y vaciaron estanterías. Las autoridades intentaban calmar a la población asegurando que había provisiones de sobra.
Los pekineses temían un cierre repentino como en Shanghái. Llevan un mes confinados y muchos residentes se han quejado de que no hay comida ni medicinas.
Shanghai es la zona cero de la mayor ola de Covid-19 en China desde que comenzó la pandemia hace más de dos años. Con una población de 26 millones de habitantes, la ciudad portuaria se encuentra en un estricto confinamiento desde el 28 de marzo, que ha obligado a algunos trabajadores a dormir en sus fábricas.
El covid se extiende en China
En Pekín hay 33 nuevos contagios de coronavirus, todavía muy lejos lejos de los más de 16.000 nuevos casos de Shanghái.
El responsable de sanidad municipal, Xu Hejian, ha dicho que la expansión del virus en Pekín estaba "dentro del margen de control". Pero las autoridades quieren evitar un brote fuera de control y han pedido a las compañías permitir el teletrabajo, han cerrado numerosos edificios con infectados y han suspendido el turismo en grupo antes de la fiesta nacional del 1 de mayo.
Además, las autoridades han pedido a los residentes de la capital que no abandonen la ciudad salvo que sea imprescindible.
De momento las medidas en Pekín son tímidas. "Estoy sorprendido de que el gobierno no ha impuestos políticas restrictivas en Pekín tan severa y rápidamente como en otras ciudades que han experimentado brotes similares en semanas recientes", asegura el jefe de Pinpoint Asset Management, Zhiwei Zhang.
En su política de cero covid, China ha aplicado estrictos confinamientos, tests masivos y duras restricciones de viaje para frenar el virus.
Pero las autoridades cada vez enfrentan más dificultades por el impacto de estos protocolos en la economía y la moral de las empresas, especialmente cuando estos brotes se dan en las ciudades más importantes del país.