Terremoto
El terremoto registrado en Marruecos ha dejado a miles de personas heridas y desaparecidas bajo los escombros. El país ya ha solicitado ayuda humanitaria internacional.
Más de 2.000 personas han fallecido y otras 2.421 han resultado heridas en el terremoto de magnitud 7 registrado en Marruecos. El seísmo fue registrado en la provincia de Al Hauz, donde se han registrado la mayoría de fallecidos.
Cientos de personas se encuentran desaparecidas entre los escombros, lo que podría provocar un aumento de heridos o fallecidos en las próximas horas. La mayor parte de los afectados han dormido esta noche al raso. Según datos de la Organización Mundial de la Salud (OMS), hay más de 300.000 personas afectadas por el terremoto.
España fue uno de los países que ofreció ayuda en labores de rescate y reconstrucción tras el terremoto. Horas después, el ministro de Asuntos Exteriores, Unión Europea y Cooperación en funciones, José Manuel Albares, confirmó que Marruecos había pedido oficialmente dicha ayuda.
Un equipo de Búsqueda y Rescate Urbano (USAR) de la Unidad Militar de Emergencias (UME) compuesto por 56 militares y cuatro perros parte desde España hacia la zona del seísmo para colaborar en la búsqueda de supervivientes. Este tipo de equipos están diseñados para auxiliar de forma rápida a naciones azotadas por un desastre. También parten hacia la zona cinco bomberos de la Diputación de Málaga, con experiencia en este tipo de emergencias. La Comunidad de Madrid enviará un equipo de 30 personas de la Unidad Especial de Emergencia y Respuesta Inmediata de la Comunidad de Madrid (Ericam) para colaborar también en tareas de búsqueda y rescate.
Los trabajadores de los servicios de emergencias marroquíes se enfrentan al reto de llegar a las zonas más afectadas en las montañas del Atlas, una cordillera donde hay localidades de difícil acceso.
Los expertos consideran que una persona puede sobrevivir bajo los escombros hasta tres días sin beber agua ni consumir ningún tipo de alimento. Aunque pueden haber casos que no superen ese tiempo, pues es complicado conocer con exactitud cuánto puede sobrevivir alguien.
La posibilidad de que una persona desaparecida entre los escombros sobreviva disminuye según pasa el tiempo. Por ello, los equipos de rescate suelen tener límites de tiempo. Es el caso de Naiones Unidas, que cancela sus misiones de rescate entre los cinco y siete días después y los especialistas mantienen que a partir de las 48 horas el riesgo se dispara.
También puede disminuir en caso de estar inmovilizado o de tener heridas graves. Incluso con la mala ventilación dependiendo de la zona donde se encuentre el desaparecido. El objetivo es conseguir tener una bolsa de aire para mantener el oxígeno.
Turquía y Siria registraron un terremoto de 7,8 a principios de año. Las labores de rescate fueron complejas por la cantidad de escombros acumulados. Fueron miles de personas las rescatas por los equipos de rescate, la mayoría niños.
Fue el caso del bebé que nació entre los escombros de Alepo mientras que su madre se encontraba atrapada. O los dos hermanos rescatados, donde la hermana mayor protegía la cabeza del más pequeño.
El motivo de que más niños sobrevivan que adultos es que necesitan menos espacio y se esconden en cubículos pequeños donde tienen más aire.