TRAS EL GOLPE DE ESTADO
La junta militar de Tailandia ha levantado el toque de queda en tres zonas turísticas, con lo que son ya seis áreas de playa donde los turistas no se verán obligados a volver a sus apartamentos a medianoche, informó la prensa local.
La medida incluye a las ciudades costeras de Cha-am y Hua Hin, así como Krabi y la isla de Phang-nga, que se suman así a la ciudad de Pattaya y las islas Samui y Phuket, donde se levantó el toque de queda el pasado martes. La prohibición de circular en las calles -entre medianoche y las cuatro de la madrugada- continúa en el resto del país, incluida Bangkok.
No obstante, algunos bares desafían el toque de queda y se puede ver a turistas y locales hasta altas horas de la madrugada en algunos puntos de la capital. La junta militar decidió empezar a relajar las restricciones el pasado martes tras las quejas de los empresarios por los daños que el toque de queda causa al sector turístico, que supone el 7,3% del PIB del país.
Tras la asonada del pasado 22 de mayo, la industria ha rebajado la previsión de llegada de turistas para este año a 26,8 millones, frente a los 28,04 millones previstos inicialmente. El Ejército impuso el toque de queda entre las 22.00 y las 5.00 horas tras tomar el poder, aunque cinco días más tarde lo redujeron a entre la medianoche y las cuatro de la madrugada.
Según la Asociación de Agencias de Viajes de Asia Pacífico hubo unas 5.000 cancelaciones de visitas a Tailandia al día siguiente del golpe de Estado, que ha llevado a 62 países a emitir alertas a sus turistas, 19 de ellas -incluida España- desaconsejando el viaje.