Un surcoreano mata al perro de su vecino y le invita a comérselo

Un agricultor surcoreano confesó haber invitado a su vecino a comerse su propio perro. El hombre mató al animal, un corgi galés, porque le molestaban sus constantes ladridos. Le arrojó una piedra que dejó al animal inconsciente, y después le escondió para estrangularlo.

Tras la desaparición, la familia inició una búsqueda por el barrio. Repartieron folletos que contenían la foto del perro, número de teléfono y recompensa para quien lo encontrara. Cuando se acercaron a la casa del asesino del animal, les prometió que les avisaría si sabía algo del can. En ese momento ya tenía al perro oculto, según informa The Guardian.

Poco después, ese hombre invitó a sus vecinos a comer, incluyendo a los dueños del animal, que no aceptaron la invitación. Finalmente, fue otro de los miembros de la comunidad quien avisó del crimen.

Tras conocer el caso, se ha comenzado una campaña para recoger firmas que conciencien contra la ingesta de carne de perro. Esta práctica era muy habirual en Corea del Sur pero se ha ido reduciendo hasta convertirse en tema tabú. Hasta ahora la petición ha conseguido 15.000 firmas.