Sufre un infarto después de ser declarado inocente tras pasar 23 años en prisión

David Ranta es un neoyorkino que ha sido liberado de prisión después de haber pasado 23 años encarcelado acusado del asesinato de un rabino. Ahora, se ha probado que Ranta no cometió el asesinato.

Una vez volvió a casa con su familia, empezó a sufrir un dolor muy fuerte en el pecho y le llevaron a urgencias pensando que se trataba de un ataque de pánico. Una vez en el centro médico, según reveló el abogado del ex recluso al New York Times, se le estabilizó y sufrió un ataque al corazón.

David Ranta fue condenado a 37 años de prisión en 1991 después de haber sido declarado culpable de la muerte de un rabino judío ortodoxo en el robo de su casa en febrero de 1990. Ranta siempre se declaró inocente de las acusaciones.

La oficina del fiscal de Brooklyn explicó que una investigación interna que había descubierto una prueba que no había sido examinada durante el juicio, la que permitió determinar la inocencia de Ranta.

Al salir de prisión, prefirió hospedarse en un hotel para evitar el contacto con los medios de comunicación y así lograr una más fácil reinserción en la sociedad tras su larga estancia entre rejas.

Ranta continúa hospitalizado a la espera de una cirugía.