LES PEGABAN SI SE NEGABAN A COOPERAR
Siete personas fueron detenidas en la provincia noroccidental china de Gansu por obligar a niños de escuelas locales a donar sangre, según han informado las fuentes policiales.
Los detenidos son trabajadores del Instituto de Productos Biológicos de Lanzhou (capital provincial), una de las mayores fabricantes nacionales de plasma para hospitales y otros bienes relacionados.
Entre los detenidos se encuentra el subdirector de uno de los centros de donación de sangre administrados por la compañía, apellidado Huang, ha señalado la información policial. Huang ha declarado a la policía que la decisión de usar niños en donaciones sin autorización se había tomado a raíz de presiones de la compañía, que había pedido a sus empleados que lograran más donantes en el actual ejercicio.
Al menos ocho estudiantes de entre 10 y 16 años fueron obligados a donar sangre al menos una vez al mes, desde principios de este año, y el dinero que en ocasiones se paga por estas donaciones se lo embolsaban los mismos que les forzaban a realizarlas.
Además, los detenidos elaboraron falsas identificaciones para los jóvenes donantes, con el fin de que figuraran como adultos (en China la edad legal para poder donar es de 18 a 55 años), y les golpeaban si se negaban a "cooperar".
El escándalo fue destapado por los padres de uno de los niños obligados a donar, después de que éste les contara que había recibido una de esas palizas.
En China la donación de sangre es relativamente escasa, por creencias tradicionales según las cuales desprenderse de ella es malo para la salud, y también por la mala fama que esta práctica se ganó en los años 90, por el escándalo de los centros de recolección sanguínea que contagiaron el virus del sida a miles de personas en zonas rurales del país.