EN BRASIL
Durante esta escena que se ha producido en Brasil, se escucha cómo otras personas se ríen de fondo y se burlan mientras que la mujer aterrorizada parece aceptarlo y no opone resistencia. Según informa Metro, después de haberla rapado, se le ordena al hombre que efectúa el castigo que le afeite también las cejas.
Finalmente, el hombre coge un manojo del pelo recién cortado y se mofa de la joven poniéndoselo en su cabeza a modo de peluca. Otro miembro de la pandilla -el que había estado dictando las órdenes- le entregó un teléfono móvil y le ordenó que hiciera una llamada, que se creía que era al hombre con quien había engañado a su pareja.
Los expertos locales explican que este tipo de castigo de advertencia es común en los cárteles de drogas en todo Brasil, realizando una vergüenza pública a cualquiera que rompe sus reglas.