LOS EXPERTOS CREEN QUE DISPARARÁN EL 15 DE ABRIL
La inteligencia surcoreana no ha detectado señales de un lanzamiento inminente de misiles por parte de Corea del Norte en los últimos dos días, informó un portavoz del Gobierno surcoreano.
El portavoz precisó que las imágenes tomadas por satélite muestran que Corea del Norte no ha movido las plataformas de lanzamiento de misiles desplegadas en su franja oriental desde el jueves.
Esta semana Seúl explicó que el régimen norcoreano se dedicó a mover en repetidas ocasiones dentro y fuera de una nave de la ciudad de Wonsan dos plataformas móviles (TEL, del inglés "Transport Erector Launcher") cargadas con dos misiles de medio alcance en un aparente intento de confundir a la inteligencia surcoreana.
"No hay signos de que los TEL se hayan movido dentro y fuera de las instalaciones desde el jueves ni de que el lanzamiento de misiles sea inminente", explicó a Yonhap el portavoz. Pyongyang mantuvo además en movimiento durante la semana pasada en la provincia de Hamgyong del Sur otras cuatro plataformas móviles, que actualmente están detenidas.
"La situación con respecto al lanzamiento de misiles no ha cambiado", insistió el representante del Ejecutivo surcoreano. La tensión se ha incrementado en la región ante la especulación de que Corea del Norte pretende realizar próximamente y a modo de prueba uno o varios lanzamientos de misiles de corto y medio alcance, los cuales empezó a desplegar el lunes pasado.
Muchos expertos apuntan a que Pyongyang realizará los disparos en los próximos días para conmemorar el 101 aniversario del nacimiento del fundador del país, Kim Il-sung, que se celebra el 15 de abril. La mayoría de los expertos de Corea del Sur creen que el régimen comunista liderado por Kim Jong-un, nieto de Kim Il-sung, no tiene intención de iniciar una guerra y emplea su reciente cadena de amenazas como una estrategia para reforzar la posición de su Gobierno totalitario dentro del país y de cara al exterior.
Desde principios de marzo, después de que la ONU ampliara sanciones contra el régimen por su prueba nuclear de febrero, Pyongyang ha llevado a cabo una campaña ininterrumpida e insistente de amenazas bélicas contra Seúl y Washington, con quienes sigue técnicamente en guerra desde hace más de seis décadas.