Irán
El hombre había sido condenado a muerte por matar a dos miembros de las fuerzas de seguridad, según la agencia judicial Mizannews.
Irán ha matado a una segunda persona condenada a muerte por participar en las protestas antigubernamentales desatadas por el fallecimiento de la joven Masha Amini. Este segundo protestante ha sido ahorcado públicamente este lunes. Según detalla la agencia judicial Mizannews, el ejecutado había sido condenado por matar a dos miembros de seguridad.
"Majid Reza Rahnavard ha sido ahorcado en público esta mañana en (la ciudad santa chií de) Mashhad. (...) Fue condenado a muerte por 'librar una guerra contra Dios' tras matar a puñaladas a dos miembros de las fuerzas de seguridad", ha explicado la agencia judicial. Es la segunda ejecución en Irán en menos de una semana tras la muerte de otro joven que hirió con un cuchillo a un guardia de seguridad.
Desde la muerte de la joven en dependencias policiales tras ser detenida por no llevar velo, las protestas en Irán son cada vez más intensas. Las manifestaciones han derivado en una fuerte crítica contra el régimen de los ayatolás. Irán sigue furioso. Las manifestaciones evidencian una tensión que no se veía en el país asiático desde la revolución de 1979.
Penas de muerte para participantes de las manifestaciones
La ONG Amnistía Internacional ha denunciado que las autoridades iraníes buscan la pena de muerte para al menos 21 personas. Hablan de "juicios falsos diseñados para intimidar a quienes participan en el levantamiento popular que ha sacudido a Irán". Esta segunda ejecución ha sido pública. Los medios de comunicación estatales en Irán retransmitieron imágenes del hombre en el momento en que apuñaló a una persona.
Desde la agencia judicial Mizan aseguran que el hombre ejecutado fue detenido cuando intentaba huir del país hace 23 días. La sentencia de muerte fue confirmada por un tribunal superior. El grupo de derechos humanos HRANA asegura que hasta el domingo habían muerto 488 manifestantes, incluidos 68 menores. Asimismo, añaden que 62 miembros de las fuerzas de seguridad también murieron. Se cree que hasta 18.259 manifestantes fueron arrestados.
Naciones Unidas denuncia que las protestas han costado más de 300 vidas, un alto organismo de seguridad estatal iraní ha comentado que son 200 personas, incluidos miembros de las fuerzas de seguridad, los que han muerto en los disturbios.