A pesar de la petición que presentaron en el Congreso
Trump es el primer presidente Estadounidense desde Richard Nixon que se niega a divulgar su declaración fiscal.
Los demócratas aprovecharon su mayoría en la Cámara de Representantes para reclamar, el pasado miércoles, las seis últimas declaraciones de impuestos de Donald Trump.
Mick Mulvaney, jefe del gabinete interno de Trump, aseguró mediante una entrevista en el canal de Fox que los demócratas nunca accederán a estos documentos y que no tienen por qué hacerlo.
"Los electores sabían que el presidente habría podido presentar sus declaraciones de impuestos, sabían que no lo había hecho y lo eligieron igualmente y, por supuesto, eso es lo que vuelve locos a los demócratas", afirmó el jefe de gabinete.
Los demócratas de la cámara han asegurado que quieren comprobar como el presidente estadounidense lleva a cabo la inspección de las declaraciones.
Jay Sekulow, abogado de Trump, argumentó este domingo en una entrevista para el canal ABC que Trump está reticente a entregar estos documentos puesto que ya fue objeto de control fiscal.
El abogado personal del presidente aseguró que "Podrían pedir al IRS qué trabajo hacen (sus inspectores), cuáles son los procedimientos de control fiscal. La idea de que se pueda utilizar el IRS como arma política es incorrecta desde el punto de vista del derecho y la Constitución". Un congresista demócrata de la cámara aseguró que la petición no era ‘en absoluto’ política.
Los demócratas descartan por el momento lanzar un proceso de destitución contra Trump aunque las investigaciones parlamentarias contra él se hayan multiplicado.