Estados Unidos
El jefe de la diplomacia de Estados Unidos inicia una gira en la región después de la muerte en un ataque del número dos de Hamás.
El mundo observa con preocupación el aumento de las tensiones en Oriente Próximo. Desde el inicio de la guerra entre Israel y Hamás se plantearon los temores de que el conflicto se extienda y esta semana ese miedo se ha disparado después de la muerte en un ataque en Beirut del número dos de Hamás. Las reacciones han sido inmediatas. El jefe de la diplomacia de Estados Unidos, Antony Blinken, inicia hoy una gira en la región con escala en Israel para abordar la situación de las hostilidades.
Según han revelado fuentes de la Casa Blanca bajo condición de anonimato, junto a Blinken también viaja el enviado diplomático estadounidense Amos Hochstein. El objetivo del que será el cuarto viaje del secretario de estado norteamericano desde el inicio de la guerra, es tratar de rebajar tensiones entre Israel y Hizbolá.
La muerte del número dos de Hamás en un bombardeo en Beirut ha hecho saltar todas las alarmas. Aunque la milicia islamista libanesa no ha anunciado un cambio de estrategia, su líder ha lanzado una dura advertencia al gobierno de Netanyahu: “Hasta ahora, nuestra postura ha sido calculada. Sin embargo, si el enemigo decide lanzar una guerra contra nosotros, nuestros hombres, nuestros misiles, están listos. No habrá más reglas, no más límites”.
A ese golpe a la cúpula de Hamás se suman las dos explosiones que causaron la muerte de cerca de un centenar de personas en Irán. Fuentes del régimen iraní apuntaron a Israel y a Estados Unidos como responsable de la masacre. Washington ha negado cualquier implicación en el atentado y asegura que no ve indicios de que Israel haya tenido algo que ver. "A nadie le interesa, ni a ningún país de la región, ni a ningún país del mundo, que este conflicto se intensifique más de lo que ya está", ha asegurado en las últimas horas el portavoz del Departamento de Estado, Matthew Miller.
Blinken también hará parada en Turquía, el país miembro de la OTAN más crítico con la ofensiva de Israel contra Hamás en la Franja de Gaza y su presidente, Recep Tayyip Erdogan, ha comparado al primer ministro israelí, Benjamín Netanyahu con el dictador nazi Adolf Hitler. Turquía, que al contrario que EE.UU. y la Unión Europea no considera a Hamás una organización terrorista, ha pedido de forma repetida un alto el fuego humanitario para Gaza.