EN NUEVA YORK
El jefe del Ejecutivo, Pedro Sánchez, acompañado de su esposa, Begoña Gómez, acudió este lunes por la noche a la recepción que el presidente de Estados Unidos, Donald Trump, ofrece a los jefes de Estado y de Gobierno que acuden a la Asamblea General de la ONU, aunque entre los mandatarios solo hubo, como estaba previsto, un saludo protocolario, han informado fuentes gubernamentales.
A la tradicional recepción que ofrece el presidente del país anfitrión, en el hotel Lotte New York Palace, solo acuden los mandatarios y sus acompañantes, pero no asesores ni colaboradores. La cobertura de prensa está limitada al equipo oficial de la Casa Blanca. Es la segunda vez que el presidente del Gobierno coincide con Donald Trump, después de la Cumbre de la OTAN del pasado mes de julio en Bruselas, donde ambos se saludaron brevemente.
Fuentes del Ejecutivo sostienen que la Asamblea de la ONU no es el marco más adecuado para buscar una reunión bilateral formal con el presidente de los Estados Unidos, sino que este foro suele aprovecharse para encontrarse con líderes de países a los que es más complicado organizar un viaje bilateral.
En ese sentido, este martes Sánchez tiene previstos encuentros con mandatarios de Nueva Zelanda, Corea del Sur, Sudáfrica y Etiopía y con el presidente del BID, además de tener su primer encuentro con el nuevo presidente de Cuba, Miguel Díaz-Canel, y con el presidente argentino, Mauricio Macri, en su condición de presidente de turno del G20.
Begoña Gómez acompañará este martes a Sánchez en la apertura de la Asamblea General de la ONU por parte del secretario general, Antonio Guterres --uno de los actos en los que está previsto la presencia de acompañantes-- y por la tarde a la conferencia que pronunciará en el Council on Foreign Relations. A mediodía asiste a la recepción que ofrece Sophie Trudeau, esposa del primer ministro canadiense, en la residencia del embajador de este país.