MEDIRÁ MÁS DE 21.000 KILÓMETROS
Un ambicioso proyecto del presidente de la empresa Russian Railways, Vladimir Yakunin, permitirá unir Estados Unidos y Europa mediante la carretera más larga del mundo.
La propuesta, presentada hoy en una reunión de la Academia de Ciencias de Rusia, propone construir una vía de más de 21.000 kilómetros, que irá desde el borde occidental de Rusia hasta el estrecho de Bering, donde el país da un codazo Alaska.
La ruta del Ferrocarril transiberiano correría al lado de esta nueva carretera, bautizada como el 'Trans-Eurasian Belt Development (TEPR)'.En Rusia, la red de la autopista Trans-Siberiano es de más de 6.800 kilómetros, es decir, la nueva carretera se convertiría en la más grande y larga jamás construida, con secciones adicionales en el oeste y el este.
Este esquema también se ha propuesto para convertir a Rusia en un centro de transporte global, un puente entre Europa, Asia y América del Norte, lo que también generará la revitalización de la economía rusa y del turismo.
En declaraciones recogidas por el 'Siberian Times', Yakunin explica que "el proyecto es muy ambicioso y costará mucho, pero resolverá muchos problemas de desarrollo para esta región. Será un interestatal entre las civilizaciones".
La carretera pasará por grandes ciudades como Londres, Moscú, Nome y Fairbanks (Alaska) y Nueva York.
Todavía no se conoce la empresa que se hará cargo de sufragar el proyecto, ni siquiera se ha presentado un presupuesto. Aun así, se prevee que será una fuente de beneficios para aquellas entidades que inviertan en ella.