Guerra Rusia Ucrania
Rusia está aumentando sus efectivos en el sur para ejercer más presión sobre el este de Ucrania. Mientras, sigue la evacuación de soldados ucranianos en la planta de acero de Azovstal.
Las tropas rusas fortifican posiciones en el sur de Ucrania. En concreto, están aumentando sus efectivos en el sur con la intención de ejercer más presión hacia el este de Ucrania. Allí, en el Donbás, los combates se recrudecen. En Mariúpol, otros 700 soldados ucranianos han abandonado la planta de acero.
Dejan atras el símbolo de la resistencia mientras sus superiores permanecen escondidos dentro de Azovstal. A algunos les ha costado mantener la formación ante unos soldados rusos que inspeccionan minuciosamente sus pertenencias. Ya en el hospital los heridos cuentan que están siendo bien tratados. Dicen que tienen comida y médico y que nadie les maltrata física o psicológicamente.
El riesgo de enfermedades
Ahora la población de Mariúpol no vive angustiada por las bombas, sino por la falta de comida y sobre todo de agua potable. "Podrían darse enfermedades infecciosas como disentería o cólera porque Mariúpol no tiene las infraestructuras necesarias", dice el alcalde de la ciudad.
La guerra ha entrado en su fase larga y Moscú trata de reorganizar sus tropas para ejercer más presión en el este y ocupar el sur del país. "Ha habido ataques con misiles en la región de Leópolis, Sumy y Chernígov y ataques aéreos en Lugánsk. Y hemos detectado operaciones encubiertas a lo largo de nuestra frontera", asegura Zelenski en un comunicado.
Putin también ha ordenado desplegar otra arma letal: los Terminator. Unos carros blindados capaces de derribar helicópteros y destruir los tanque ucranianos.