Invasión rusa de Ucrania
El Ejército de Rusia sigue lanzado a invadir Ucrania y continúa con su feroz ofensiva. Un misil lanzado por los rusos ha impactado esta pasada madrugada contra un edificio residencial en Kiev.
Desde que Rusia comenzara la invasión de Ucrania en la madrugada del pasado 24 de febrero, Europa sigue descubriendo el horror de la guerra, algo que no se conocía con tanta crudeza en el continente desde el 12 de noviembre de 2001, cuando terminó el breve conflicto que se produjo en la por entonces República de Macedonia (actual Macedonia del Norte) y que marcó el final de la Guerra de Yugoslavia.
Tras años sin conflictos bélicos en Europa, la amenaza rusa se ha hecho más presente que nunca y el temor a que vaya más allá de Ucrania es real. Sin embargo, centrados en el presente, es la nación ucraniana la que está padeciendo las peores consecuencias de la obsesión de Vladímir Putin por recuperar el antiguo imperio que fue la Unión Soviética.
Precisamente, Putin está contando con el apoyo de antiguas repúblicas soviéticas, como es el caso de Armenia, Bielorrusia, Kazajistán o Turkmenistán. Y, con su apoyo, Putin sueña en ser el héroe de Rusia para reconstruir lo que un día fue el mayor imperio comunista, y que, a día de hoy, solo es un montón de cenizas que ve cómo países como Ucrania intentan integrarse en las esferas occidentales, como la Unión Europea o la OTAN, lo que va en contra de sus intereses.
Bombardeos en zonas residenciales
Esta pasada madrugada, Ucrania ha vuelto a padecer los feroces ataques de Rusia, cuyo Ejército continúa arrasando con todo lo que puede y no hace distinciones a la hora de matar a sus enemigos. De momento, se tiene confirmado que 198 personas han perdido la vida en estos tres primeros días de conflicto, entre las cuales hay dos niños pequeños.
Uno de los últimos ataques realizados contra las zonas residenciales ha sido en Kiev, la capital de Ucrania. Un edificio ha quedado semidestruido después de haber recibido el impacto que, se presume, ha sido lanzado con casi total seguridad por parte del Ejército de Rusia. El impacto ha sido muy fuerte y podría haber riesgo de derrumbe en el edificio.
Sin embargo, hay una buena noticia en este último caso, y es que no ha habido víctimas mortales, ni tan siquiera heridos confirmados. Ello se debe a que la mayor parte de los residentes del edificio habían huido de Ucrania, estaban refugiados en el metro o no se encontraban en su hogar en el momento de los hechos.