Invasión rusa de Ucrania
El Ejército de Rusia alista en sus filas a Yegor Komarov, un temible caníbal que estaba encarcelado por comerse parte de los cuerpos de dos personas: “Me los comí solo para probar cómo sabían”.
Los malos pronósticos de Rusia en la guerra que libran contra Ucrania se están cumpliendo poco a poco. Por ese motivo, el Kremlin busca cómo rearmarse y reforzar su Ejército, en medio de una tensión social cada vez más grande entre sus fronteras. Habiendo llevado como reservistas a una gran cantidad de rusos que se oponían a luchar en el frente, la estrategia del Kremlin también pasa por reclutar a presos que actualmente están encarcelados.
Entre esos presos, hay uno muy peligroso que se ha alistado al Ejército para ser liberado, siempre y cuando cumpla seis meses sirviendo en el frente. Su nombre es Yegor Komarov y cumplía condena hasta hace poco por haberse comido parte de los cuerpos de dos personas. Había sufrido un accidente automovilístico y se encontró con dos ciudadanos a los que decapitó, haciendo trozos su cuerpo y llegando a cocinarlos para comérselos.
Por si fuera poco, cuando los agentes le cazaron, él admitió que lo había hecho porque le apetecía probar el sabor de los cadáveres: “Me los comí solo para probar cómo sabían”. Su caso fue muy conocido en Rusia y se le llegó a comparar con el psiquiatra Hannibal Lecter, el popular villano que encarnaba Anthony Hopkins y que estaba encerrado por un canibalismo que él reconocía eufórico, con frases como una muy famosa en la que contaba cómo se comió a un trabajador del censo: "Me comí su hígado acompañado de alubias y un buen chianti".
Violadores y criminales también irán a la guerra
El grupo Wagner, encargado de reclutar a nuevos integrantes para el Ejército ruso, también está metiendo en las filas a numerosos presos que acumulan cargos muy graves, como es el caso de violadores o asesinos en serie. No obstante, también se están llevando a los manifestantes que son detenidos en las protestas e incluso a indigentes, que no tienen ninguna experiencia militar, pero que sirven para paliar las numerosas bajas sufridas por los rusos.
Rusia tiene previsto continuar con su llamada 'operación militar especial' en Ucrania hasta las últimas consecuencias. Este viernes, arrancan los referéndums en las ciudades de Jersón, Zaporiyia y las autoproclamadas repúblicas de Donetsk y Lugansk para anexionarse a Rusia. La comunidad internacional los califica de "ilegales" y aseguran que no se reconocerán de ninguna manera al no haber siquiera unas mínimas garantías de votar libremente.