Filtraciones
Alemania ha afirmado que investigará lo ocurrido para aclararlo "con mucho cuidado y con mucha rapidez".
Aumenta la tensión entre Alemania y Rusia. El Kremlin ha convocado al embajador alemán en Moscú, Alexander Lambsdorff, para pedir explicaciones por la filtración de una conversación entre militares donde abordaron asuntos relacionados con la guerra en Ucrania.
Por el momento no han trascendido más detalles. Según la agencia rusa de noticias 'TASS', Lambsdorff se habría reunido en la sede del Ministerio de Exteriores ruso. El embajador ruso ha desmentido que fuera convocado por el asunto y afirma que la cita ya había sido planeada con anterioridad.
La autenticidad de la filtración fue confirmada por fuentes del Ministerio de Defensa alemán después de que medios rusos publicasen una grabación de 38 minutos. En el audio se escucha a altos mandos de la Fuerza Aérea discutir la posibilidad de que Ucrania utilizase misiles de crucero alemanes Taurus, armas que el Gobierno alemán se niega a suministrar por temor a verse envuelto directamente en la guerra.
En esta línea, hablan sobre el suministro de estos misiles a Ucrania, además de una declaración explosiva sobre otros aliados occidentales. Asimismo, mencionan que los británicos tienen "unas cuantas personas sobre el terreno" en relación con el despliegue de sus misiles de crucero Storm Shadow, que fueron entregados a Ucrania.
Ante la situación, el canciller alemán, Olaf Scholz, afirmó que aclarará la situación. "Hay que aclarar esto con mucho cuidado, con mucho interés y con mucha rapidez. Eso es lo que hace falta", ha dicho.
El portavoz del Kremlin, Dimitri Peskov, ha señalado por su parte que confían en las palabras de Scholz, aunque pone en duda el papel de control del canciller alemán sobre las propias Fuerza Armadas. Para Peskov, las grabaciones reflejan cómo en el seno de las Fuerzas Armadas alemanas se discute "en profundidad" la posibilidad de lanzar un ataque sobre territorio ruso.
"Tenemos que averiguar si las Fuerzas Armadas está haciendo esto por iniciativa propia. La pregunta es cómo de controladas están las Fuerzas Armadas alemanas y hasta qué punto el señor Scholz controla todo esto", ha dicho Peskov.
La situación se produce también tras el malestar de Reino Unido por lo que Londres consideró una indiscreción por parte de Scholz cuando declaró que "lo que hacen británicos y franceses en materia de control de objetivos y acompañamiento no puede hacerse en Alemania".
Las Fuerzas Armadas de Alemania tienen actualmente unos 600 misiles de crucero Taurus y el Gobierno federal estaría considerando enviar al menos 100 de estos proyectiles a Ucrania en dos lotes de 50 unidades. Los datos llegan después de que el canciller alemán anunciara por primera vez que su gobierno no entregará a Kiev estas armas. El ministro de Asuntos Exteriores ucraniano, Dimitro Kuleba, ha insistido nuevamente a Alemania en la entrega de estos misiles y subraya que el temor a una escalada del conflicto es infundada como demuestra, según indica, el envío de los tanques Leopard.
"Creo que después de la primera entrega de los tanques Leopard, ese temor se disipó. Desde entonces, el argumento de la escalada ha estado fuera de discusión", ha señalado.
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