Rusia busca hacer de Severodonetsk, donde han comenzado los combates cuerpo a cuerpo, la nueva Mariúpol

Tras la caída de Mariúpol, hasta el momento la ciudad más afectada por la guerra entre Rusia y Ucrania, donde las bombas han arrasado con la práctica totalidad de los edificios, reduciéndolos a escombros, las tropas de Vladimir Putin se han fijado un nuevo objetivo principal en su ofensiva por hacerse con el control total en el Donbás: la ciudad de Severodonetsk, en la que ya han comenzado los combates cuerpo a cuerpo.

Según el Gobierno de Kiev, además, el Ejército ruso planea llevar a cabo una "operación de limpieza" en Severodonetsk y sus alrededores, en la región oriental de Lugansk, para eliminar o neutralizar a cualquier enemigo en esa zona que está a punto de controlar totalmente. Unas declaraciones que llegan apenas unas horas después de que EEUU confirmase que, finalmente, no enviará misiles de largo alcance a Ucrania.

Serhii Haidai, jefe de la administración militar regional de Lugansk, ha explicado este martes que la situación en esta ciudad, la segunda en importancia que aún no controlan del todo los rusos en la región de Lugansk, "es extremadamente difícil", en declaraciones recogidas por la agencia Efe.

"En la mañana del 31 de mayo se supo que los invasores rusos planean llevar a cabo una operación de limpieza alrededor de Severodonetsk, en la región de Lugansk", ha escrito el responsable militar en las redes sociales, según las agencias locales ucranianas, añade Efe.

Equipos con grandes lanzallamas

El Ejército ruso "ha desplegado un batallón de soldados allí, que peinarán las aldeas en las afueras de Severodonetsk, están reuniendo su equipo", ha precisado.

Los rusos "están enviando un batallón de soldados que pasarán por las aldeas circundantes. Están moviendo equipos con grandes lanzallamas para simplemente quemar a nuestro ejército, junto con la población civil, no les importa", ha denunciado Haidai.