Reino Unido
Rishi Sunak, ya como primer ministro de Reino Unido, afronta una etapa de absoluta división en el Partido Conservador, con la economía dañada y con la reputación británica por los suelos.
Este 25 de octubre, ha comenzado el tercer mandato del año en Reino Unido. Tras la salida de Boris Johnson el pasado 6 de septiembre, y la marcha de Liz Truss este mismo martes, llega Rishi Sunak para tratar de afrontar un ciclo que ha hundido a los conservadores, ha dejado la imagen del país arrastrada por los suelos, y con el país dividido a nivel social. El nuevo 'premier' es consciente del desafío, pero llega dispuesto a rebatir los malos pronósticos.
Precisamente, Sunak ha sido ya uno de los grandes artífices de la economía británica en los últimos años, al haber sido el ministro de Finanzas en Reino Unido durante la etapa de Boris Johnson como 'premier'. A falta de que se conozcan los nuevos integrantes de su gabinete, Sunak apuesta por una estrategia diferente a la de su predecesora, asegurando que ha ella "ha cometido errores", pero resaltando también que los corregirá, aunque para ello, advierte, habrá de tomar "decisiones difíciles".
Esa es precisamente una de las tres funciones que tiene encomendada el nuevo primer ministro. La primera de ellas pasa por unir al Partido Conservador, sumido en un constante declive desde que Liz Truss presentara su plan fiscal. La segunda pasa por modelar las reformas económicas para evitar nuevos desplomes de la libra, y el tercero consiste en devolver a Reino Unido la alta reputación mundial que tantos años le ha caracterizado, pero que ahora, está en un segundo plano.
La inesperada carambola que dio la victoria a Sunak
Este pasado lunes, expiraba el plazo para presentar los 100 avales necesarios que cada candidato necesitaba si quería ser candidato a primer ministro. Rishi Sunak ya los tenía, Boris Johnson decía tenerlos pero había optado por retirarse, y la otra candidata que buscaba la victoria, Penny Mordaunt, parecía estar a punto de alcanzarlos. De hecho, su equipo llegó a asegurar que estaba a apenas una decena de lograrlos, y que podía alcanzar la centena antes de que expirara el plazo.
Sin embargo, todo Reino Unido quedó estupefacto cuando, a apenas hora y media de que cerrara el plazo, entrara en escena George Freeman, jefe de campaña de Penny Mordaunt. Cuando todavía quedaban 77 minutos para que cerrara el plazo, publicó un tweet en el que concedió su apoyo a Sunak, tras deshacerse en elogios hacia ella: "Dada la necesidad urgente de estabilidad y unidad esta semana, la insto a unirse y a apoyar a Rishi Sunak hoy". Y, finalmente, Sunak venció, con el apoyo de Mordaunt incluido.