Bruselas
El Comisario europeo de Justicia, Didier Reynders, ha reiterado sus dudas sobre la ley de amnistía en Bruselas e insiste en que la evaluación de la Comisión sobre el texto no llegará hasta que la ley finalice su tramitación parlamentaria.
La polémica sobre la ley de amnistía todavía colea. El ministro Félix Bolaños dijo en su momento que en la Unión Europea había "preocupación cero" por la amnistía, algo que poco después se desmintió desde Bruselas. Precisamente, el comisario europeo de Justicia, Didier Reynders, sostiene ahora que todavía tienen preguntas para el Gobierno español sobre el asunto. "Le dije al ministro que tenía preguntas y por eso esperaba seguir dialogando para tener respuestas a todas nuestras preguntas hasta el final del proceso".
Reynders ha reiterado sus dudas a la vez que ha remarcado que la evaluación de la Comisión acerca del texto no llegará hasta que la ley finalice su tramitación parlamentaria. "Por supuesto que tengo preguntas", declaraba el comisario cuando ha llegado al Consejo de Justicia de este lunes en Bruselas. Allí ha coincidido con el ministro de Presidencia, Justicia y Relaciones con las Cortes, Félix Bolaños, con quien ya tuvo una reunión el pasado jueves.
Fue una cita de la que obtuvieron impresiones diferentes, ya que Bruselas negó haber expresado "cero preocupación", tal y como señaló Bolaños, sobre la ley de amnistía puesto que su análisis sigue su curso.
Cuando Reynders ha sido preguntado por esas diferencias manifestadas sobre la amnistía, ha preferido ironizar y hablar del tiempo diciendo que "no hay el mismo clima en España y en Bruselas", rebajando así el encontronazo de la semana pasada.
Reynders ha explicado que hasta que no termine el proceso de tramitación legislativa en España, la Comisión no podrá llevar a cabo su evaluación puesto que no se sabe cuál será la forma final de la ley. Mientras, seguirán los intercambios a nivel técnico en un proceso de "buen diálogo".
"El voto final se espera para el primer trimestre del año, así que tenemos tiempo", ha dicho el comisario, que no se ha arriesgado a confirmar si la Comisión presenta o no "cero preocupaciones" sobre la ley remitiéndose de nuevo al informe que Bruselas hará al final del trámite.