Guerra Ucrania
Los líderes del G7, junto al presidente ucraniano, mantendrán una reunión para analizar la situación tras los ataques rusos de este lunes en 14 puntos diferentes del país.
El G7 se reunirá mañana de manera "urgente" para analizar la situación en Ucrania tras los bombardeos perpetrados por el Ejército ruso en 14 puntos diferentes del país que han dejado, por el momento, 10 fallecidos y 70 heridos. Así lo ha confirmado en la mañana de este lunes el portavoz del Gobierno de Alemania, Steffen Hebestreit, quien ha avanzado que en esta conferencia participará, de manera telemática, Volodimir Zelenski.
El presidente ucraniano ha recibido, nada más conocerse los ataques, la llamada del canciller alemán, Olaf Scholz, quien ha acordado durante la conversación telefónica la convocatoria de la teleconferencia para abordar la situación del conflicto y reclamar una respuesta "dura" a Rusia. Asimismo, el mandatario ucraniano ha recibido llamadas de otros presidentes como Emmanuel Macron, de Francia, o Andrzej Duda, de Polonia, o Mark Rutte, de los Países Bajos.
Según ha indicado el propio Zelenski en su cuenta oficial de Twitter, participará para hablar sobre los ataques, la presión rusa y la ayuda necesaria "para restaurar la infraestructura dañada" en los bombardeos de este lunes.
Josep Borrell reafirma el compromiso de la UE con Ucrania
Por otro lado, el Alto Representante de Política de Exterior de la Unión Europea, Josep Borrell, ha asegurado hoy que los países miembros mantendrán y reforzarán su apoyo a Ucrania "tanto como sea necesario".
Borrell, mediante una conversación telefónica con Dimitro Kuleba, el actual ministro de Exteriores de Ucrania, ha condenado los bombardeos por parte de Moscú, a los que ha tildado de "indiscriminados", y ha subrayado que la UE, que ha condenado enérgicamente los ataques y ha asegurado que se trata de un "crimen de guerra", no dejará de apoyar política, militar y económicamente a Kiev.
Asimismo, el exministro español ha querido señalar a Bielorrusa como cómplice y ha pedido al régimen de Lukashenko no implicarse en el conflicto, un movimiento que pasaría por no permitir que su territorio sirva como plataforma para lanzar ataques contra civiles en Ucrania.
Por otro lado, la presidenta de la Comisión Europea, Úrsula Von der Leyen, ha cargado contra Moscú y ha pedido responsabilidades: "Rusia ha vuelto a mostrarle al mundo lo que representa. brutalidad y terror. Los responsables tienen que rendir cuentas".