EN CHINA
Un grupo de personas buscaba en el mercado de Xiaobanqiao de Kunming en China a su mascota desaparecida cuando fueron testigos del momento en el que un total de 21 perros estaba a punto de ser sacrificados para vender su carne a unos ocho euros el kilo.
Para evitar que esto ocurriera, reunieron el dinero necesario para comprarlos vivos y evitar que los mataran un totla de 1.841 euros. Finalmente, todos los perros fueron liberados y la emoción del momento fue tal que uno de ellos 'rompió a llorar'.
Los animales fueron trasladados hasta un centro veterinario de la ciudad china de Kunmíng y después fueron dados en adopción, según informa Daily Mail.