EN SAN ANTONIO DE TEPEZALÁ | MÉXICO
Agentes de la Policía estatal han encontrado a un niño de 11 años encadenado en el interior del domicilio. Según las investigaciones, el niño llevaba encadenado desde hace dos meses como castigo impuesto por su padrastro, que le sorprendió fumando un cigarro.
Los agentes entraron en la vivienda por una denuncia de varios vecinos que aseguraron que un niño llamado Jesús ya no iba a la escuela, no salía de casa, dormía a veces en el patio y que podía estar encandenado por los pies.
En el domicilio, los agentes arrestaron a un hombre identificado como Ricardo Octavio Medrano Reyes, que aseguró ser el padrastro del niño y que solo le había castigado por fumar.
El niño estaba encandenado por el pie izquierdo y no respondió a las preguntas de los policías cuando fue rescatado. Posteriormente, explicó a una psicóloga que está cursando quinto de Primaria.
En el momento del rescate, la madre del niño se encontraba trabajando como obrera en una empresa, por lo que la Policía acudió a buscarla para presentarla ante la Fiscalía.
El niño ha sido enviado a un albergue y ha quedado bajo custodia de la Procuraduría de la Defensa del Menor y la Familia.