PETER HAWKINS
Cualquier niño, sea hijo o familiar de un miembro del grupo yihadista Daesh debe ser considerado "inocente" y recibir apoyo para que pueda reintegrarse en la sociedad, en lugar de ser estigmatizado, alertó este lunes el representante UNICEF en Irak, Peter Hawkins. "Es muy importante que nos aseguremos que los niños que sufren estigma, por cualquier acción, deber ser tenidos en consideración, pues todos los niños son inocentes, y por lo tanto, deben ser tratados como inocentes", aseguró el encargado de la agencia de la ONU para la infancia.
Hawkins abogó por unos "cuidados especiales" para estos menores de edad que han sido reclutados por los combatientes de Daesh, o son sus familiares, en el marco de la inminente liberación de la ciudad septentrional de Mosul de la ocupación yihadista. "Uno de los mayores retos a los que nos enfrentamos es el de la reconciliación", que debe ser realizado por "la comunidad", indicó, así como el apoyo a los pequeños para que sean "reintegrados en la sociedad".
"Es uno de los desafíos más difíciles, pero es muy importante" realizarlo con el fin de que puedan seguir con la educación para su futuro. Según el responsable de UNICEF, es "muy importante" que estos niños que han huido del asedio yihadista en Mosul, que cuenta los días para ser liberada por completo, "vuelvan a la rutina, es decir, que tengan escuela por la mañana, que almuercen, que cenen...".
Ante esta situación, recordó a todas las partes en el conflicto que los niños "son las víctimas inocentes" de la guerra, por lo que deben ser protegidos y apoyados legalmente, sobre todo, aquellos que no tienen documentación, o tienen estampados en sus papeles un sello del EI, lo que no reconoce el Gobierno iraquí.
Los niños "son las víctimas inocentes" de la guerra, por lo que deben ser protegidos y apoyados legalmente
Por la falta de este reconocimiento, hay muchos servicios básicos que no son ofrecidos a estos niños, por lo que Hawkins llamó a que se les proporcione a todos los niños, sin excepción y "lo más rápido posible", agua, comida y vacunas contra la poliomielitis. "No solo hay que protegerlos durante los combates, sino que es crucial que se haga tras la batalla" que pondrá fin a tres años de asedio de Daesh en la ciudad que los yihadistas convirtieron en su principal feudo en Irak.
Es "muy difícil", añadió, cuantificar los menores que continúan atrapados en el casco antiguo de Mosul, en el oeste de la urbe, el último reducto de los extremistas donde no han cesado los intensos combates, pero espera que "la mayoría de ellos hayan podido huir", al igual que no ofreció ninguna cifra de niños que han muerto en el área durante los últimos días.
En los últimos tres años, UNICEF ha verificado que 1.075 niños han sido asesinados en Irak, mientras que 231 han sido reclutados para batallar.
La situación en la zona histórica de Mosul, donde se lanzó el pasado 19 de junio la fase final de la ofensiva para derrotar a los radicales en la ciudad, "es absolutamente horrible" para los niños, avisó. Muchos de ellos han muerto y los que continúan con vida llevan "probablemente" semanas en los sótanos de las casas "sin cuidados sanitarios, con comida limitada, sin dormir y traumatizados por el riesgo que corren de ser heridos por proyectiles de mortero", concluyó.