MÁS DE 430.000 NIÑOS, EXPUESTO AL HUMO DE FORMA PASIVA
Los niños del Reino Unido se libran desde hoy de sufrir el humo del tabaco en los coches al entrar en vigor una norma que prohíbe a los fumadores encenderse un cigarrillo cuando viajen con menores de 18 años, para evitar así que se conviertan en fumadores pasivos.
Esta ley, que se extiende a cualquier vehículo privado, sancionará a aquellos que la incumplan, incluyendo al conductor o a cualquiera de los pasajeros, con una multa de 50 libras (67 euros). También serán multadas las personas que fumen en un vehículo estacionado o lo hagan en un coche descapotable, aunque el automóvil esté descubierto en el momento en que se está fumando el cigarrillo.
La asesora médica del Gobierno británico, Sally Davis, calificó hoy la medida de "ley histórica" y añadió que "animará a más personas a dejar de fumar". "Espero que todos los fumadores, en particular los padres y conductores, se sirvan de la ley para dar el primer paso para dejar el tabaco", agregó.
En esos términos se expresó también la directora de la Fundación Británica del Pulmón, Penny Woods, al señalar que "hoy es un día de celebración para todos aquellos que se preocupan por la salud de las generaciones futuras".
Hace cinco años que el Reino Unido inició su lucha contra el tabaco, cuando se prohibió fumar en los puestos de trabajo y en los lugares públicos cerrados, y desde entonces los políticos plantearon la necesidad de extender la medida a otros ámbitos.
La novedosa iniciativa, que aprobó en 2014 la Cámara de los Comunes, es una enmienda a la Ley de Niños y Familias propuesta por el Gobierno de coalición entre conservadores y liberaldemócratas. La luz verde a la enmienda fue precedida por un encendido debate en el Reino Unido entre quienes defendían la necesidad de su entrada en vigor para proteger a los menores y quienes opinaban que se trataba de una intromisión inaceptable en la vida privada. En mitad de la polémica, más de 500 expertos sanitarios enviaron una carta a la revista médica "British Medical Journal" en la que instaban a los diputados a respaldar la prohibición.
También el alcalde de Londres, el conservador Boris Johnson, se pronunció entonces a favor de la enmienda y consideró "repugnante" y "dañino" el hábito de consumir tabaco en vehículos con menores. En el día en que fumar en un coche con niños se ha convertido en ilegal en el Reino Unido, un grupo de investigadores de la Universidad de Newcastle ha publicado un estudio que muestra el impacto del tabaco para un fumador pasivo en esta situación.
El experimento, que se hizo con la colaboración de fumadores voluntarios en rutas de veinte minutos, midió la cantidad de químicos nocivos que un niño respiraba en un automóvil con la ventanilla subida o bajada. Los investigadores descubrieron que, en contra de la creencia popular, incluso con la ventanilla bajada la exposición a los tóxicos del tabaco era cien veces mayor que la recomendada por las pautas de protección de la salud.
"Este experimento aporta unas cifras sorprendentes y refuerza la idea de que fumar en un coche con niños nunca es seguro y estás exponiendo a tu hijo a enfermedades graves", explicó el director de Salud y Bienestar del Instituto de Salud pública de Inglaterra, Kevin Fenton.
Los científicos detallaron que los menores son más susceptibles a los efectos del humo del tabaco, que es invisible en un 80%, ya que respiran con más frecuencia que los adultos y tienen un sistema inmune menos desarrollado. Asimismo, los expertos apuntaron que tres millones de niños están expuestos a esta situación, lo que les puede ocasionar enfermedades graves como el cáncer y otras respiratorias como bronquitis, asma e infecciones de pecho y oído.