Reino Unido niega la entrada a una jueza de Afganistán perseguida por los talibanes

Abogados de una exmagistrada de Afganistán, perseguida por los talibanes, han denunciado a las autoridades de Reino Unido y presentado una apelación al Tribunal de Inmigración británico después de la negativa de entrada de la mujer en el país. La jueza se esconde de los talibanes en Pakistán, donde su familia teme por su salud.

Así lo ha informado este sábado el bufete Kingsley Napley, que solicita que el país británico permita la entrada a la exmagistrada, identificada como 'Y'. También piden la entrada de su hijo. La mujer está en una situación "gravemente vulnerable" después de los asesinatos de sus amigos por parte de los talibanes bajo el marco de una 'purga' organizada por el movimiento fundamentalista que controla Afganistán.

Se mantiene oculta junto a su hijo después de que su casa en Kabul, capital afgana, fuera atacada por los talibanes después de trabajar 20 años en la Judicatura del país. La exjueza trabajó en casos sobre crímenes de violencia contra las mujeres y prescindió casos del grupo talibán. Durante su carrera en el mundo de la Justicia recibió numerosas amenazas de muerte.

En cautiverio después de la vuelta al poder de los talibanes

En agosto del pasado 2021, los talibanes retomaron el control en Afganistán, por lo que obligó a la exmagistrada a esconderse para salvar su vida y la de su hijo. Según el diario 'Arab News', tiene una hermana en Reino Unido y un sobrino que es funcionario en el país británico. La solicitud de entrada en el país se realizó hace 10 meses y ha sido rechazada por el Ministerio del Interior.

Oliver Oldman, abogado del bufete de abogados que representa a 'Y', ha denunciado en 'The Times' que los "compromisos con las personas en riesgo en Afganistán, aparentemente, ya se han olvidado". Desde los medios de la comunidad árabe apuntan que otras 150 juezas afganas buscan refugio tras el cambio de poder en el país, 70 de ellas todavía viven en Afganistán.

Se ha producido un notable retroceso respecto a los derechos humanos en Afganistán, sobre todo los de las mujeres. Han quedado prácticamente borradas de la vida pública. Es muy visible este retroceso después de que los talibanes se hicieran con el control del país tras dos décadas de guerra, a pesar de las continuas promesas de cambio.