Reino Unido Francia
París quiere prohibir a los pesqueros británicos que desembarquen sus capturas en algunos puertos franceses y quiere endurecer los controles sanitarios y aduaneros.
La ministra británica de Asuntos Exteriores, Liz Truss, ha exigido este lunes a Francia que en 48 horas abandone sus amenazas relacionadas con el conflicto pesquero, agravado tras la detención de un pesquero británico la semana pasada.
Francia ha avisado de que puede aplicar sanciones contra el Reino Unido a partir de este martes si no llega a un acuerdo para que Londres le conceda las licencias de pesca que considera tiene derecho en virtud del acuerdo del Brexit.
Amenazas "poco razonables"
La ministra de Exteriores, en declaraciones a la cadena Sky News, ha explicado que Francia y el Reino Unido aún no han llegado a un acuerdo, mientras que ha acusado a París de hacer "amenazas completamente poco razonables" contra la industria pesquera británica.
"Tienen que retirar estas amenazas", insistió la ministra, que no ha descartado medidas legales y ha recalcado que este problema "necesita ser resuelto en las próximas 48 horas".
Endurecimiento de los controles
Francia tiene intención de prohibir a los pesqueros británicos que desembarquen sus capturas en algunos puertos franceses y quiere endurecer los controles sanitarios y aduaneros.
"Dejar de amenazar los pesqueros del Reino Unido, dejar de amenazar los puertos del Canal (de la Mancha) y aceptar que tenemos todo el derecho de asignar las licencias de pesca en virtud del acuerdo", resaltó Truss en relación al Brexit.
Encuentro Johnson-Macron
Por su parte, el primer ministro de Reino Unido, Boris Johnson, urgió ayer al presidente de Francia, Emmanuel Macron, a retirar sus "amenazas" de impedir el desembarco pesqueros británicos si no se ofrecen más licencias para barcos galos en aguas de Gran Bretaña y las islas del canal de la Mancha, según un portavoz oficial.
En un encuentro entre ambos en los márgenes del G20 que se celebró en Roma, Johnson recalcó su "profunda preocupación por la retórica del Gobierno francés en los últimos días", añadió la fuente