IMPACTANTE PRUEBA DE SU DESESPERACIÓN
La Policía intentaba detener a uno de los refugiados que protestaban por esos realojos hacia campamentos fijos en suelo griego, cuando un hombre se sumó a la trifulca alzando a una niña de apenas unos meses sobre su cabeza y desbaratando así la actuación policial. No ha quedado establecido si existía alguna relación de parentesco del hombre con el bebé.
Tras unos momentos de tensión, en que el bebé estuvo a punto de caer al suelo, otro refugiado se lo arrebató de los brazos y pudo devolverlo a su madre. Según la prensa griega, el autor de la acción “amenazaba con arrojar al bebé contra la policía”, algo que no pudo ser confirmado.
Las autoridades griegas tratan de realojar a los 5.000 refugiados que hay en el mayor puerto del país. Pero los inmigrantes se niegan a abandonarlo por temor a quedar permanentemente confinados en un campamento.