Australia
Una mujer australiana de 49 años ha sido detenida por los hechos. Habría servido a sus comensales un plato cocinado con setas venenosas.
Curioso suceso. La policía australiana ha detenido a una mujer de 49 años por la muerte de tres personas con setas venenosas después de haber asistido a una comida que ella misma organizó el pasado 29 de julio en la localidad rural de Leongatha, que está situada a 135 kilómetros al sureste de Melbourne. Este caso ha generado bastante expectación internacional.
La policía del estado australiano de Victoria ha emitido nuevos datos acerca del suceso, donde precisan que la mujer, Erin Patterson, fue detenida el jueves por la mañana para ser interrogada. Por el momento, lo que se sabe es que no se ha formulado ningún cargo en su contra. Entre las acciones llevadas a cabo tras lo ocurrido, la policía ha registrado la casa de la mujer con perros especializados en detectar aparatos electrónicos.
Este trágico hecho ocurrió después de que Patterson ofreciera el pasado 29 de julio un plato cocinado con carne y hongos a sus exsuegros, Gail y Don Patterson, y a Heather y el pastor Ian Wilkinson, que son la hermana y el cuñado de Gail, de manera respectiva.
Tras ingerir este plato, los cuatro comensales se sintieron gravemente indispuestos. Al día siguiente, necesitaron ser ingresados en un hospital, donde tres de ellos murieron entre el 4 y el 5 de agosto pasado. Gail y Don Patterson tenían 70 años cuando murieron, mientras que Heather Wilkinson, 66. En cuanto al pastor Wilkinson, de 69 años, recibió el alta hospitalaria el pasado 23 de septiembre.
El pasado mes de agosto, Erin Patterson, que también fue hospitalizada después de la comida compró los hongos frescos y deshidratados que utilizó para cocinar el supuesto plato tóxico en un supermercado y una tienda asiática, según precisó la policía.
La mujer también comunicó a la prensa su pesar por la muerte de sus tres seres queridos presuntamente por ingerir setas venenosas. La apariencia de estas es parecida a los hongos chinos comestibles.
La oronja mortal presenta toxinas que afectan a los riñones y el hígado. Se trata de una de las setas más venenosas del mundo, que es responsable de la mayoría de muertes por ingesta de hongo.