PRIMER DISCURSO FUERA DEL GOBIERNO
Cuba no tiene que recibir "lecciones de nadie y mucho menos del Gobierno de Estados Unidos" en materia de derechos humanos y hará frente a "todo intento de manipular" ese tema para calumniar a la isla, advirtió el ya expresidente de la isla, Raúl Castro, en su último discurso ante la Asamblea Nacional.
Castro, quien tras doce años en el poder fue relevado por el hasta ahora primer vicepresidente, Miguel Díaz-Canel, afirmó que "cualquier estrategia para acabar con la Revolución fracasará y enfrentará el rechazo del pueblo cubano".
Durante su discurso de despedida de más de una hora, el general de Ejército aludió en varias ocasiones a EEUU, país con el que se reanudaron las relaciones en 2014 tras casi seis décadas de enemistad, en un histórico acercamiento que ahora peligra con la administración de Donald Trump.
Pese a que durante el "deshielo diplomático" Estados Unidos -entonces con Barack Obama en la Casa Blanca- no cesó en su "objetivo estratégico de doblegar a la Revolución", la normalización de las relaciones logró avances beneficiosos para los dos países, recordó Castro.
Pero con Trump "ha ocurrido un deliberado retroceso en las relaciones y prevalece un tono agresivo y amenazador" en las declaraciones del Gobierno del país vecino, señaló.