EN ESTADOS UNIDOS
"¿Qué llevabas puesto?", es una de las preguntas más comunes que se realizan a las víctimas de agresiones sexuales cuando cuentan su historia. Para que acabe esta situación y se deje de utilizar este tipo de cuestiones, la Universidad de Kansas en Lawrence ha puesto en marcha una exposición con la intención de demostrar que la ropa no tiene nada que ver cuando se produce una violación.
El director del Centro de Prevención y Educación sobre Abusos Sexuales de la Universidad ha asegurado que la mayoría de las violaciones que se producen en los campus universitarios ocurren en los primeros dos meses del nuevo curso escolar. En esta exposición, se muestra la ropa que decenas de víctimas de una agresión sexual llevaban puesta aquel día.
"Pantalones cortos y una camiseta sin mangas", "Mi camisa amarilla preferida pero no recuerdo qué pantalones estaba usando", son algunos de los mensajes que acompañan a la ropa de los estudiante. Entre los conjuntos, hay prensas de mujeres, niños e, incluso, de hombres.
El objetivo de esta exhibición es finalizar con uno de los mitos más extendidos de la cultura de la violación: La creencia de que la ropa que alguien que lleva puesta es una de las causas de la agresión sexual.