EEUU
El presidente de Estados Unidos, Donald Trump, ha aparecido este sábado en público con una mascarilla por primera vez desde el inicio de la pandemia del coronavirus.
Trump utilizó una mascarilla de color azul oscuro que en un extremo tenía estampado el sello de color dorado de la Presidencia y que estaba sujeta a sus orejas.
Trump sigue pensando que deben usarse de forma puntual, y lo hace después que en su país hayan muerto más de 134.000 personas y se hayan superado los tres millones de contagios.
El recuento que se hace cada día de positivos lleva cinco días marcando récords. Por eso, ese gesto de Trump podría suponer un importante cambio de estrategia.
Con el uso de la mascarilla el presidente ha dejado claro que la epidemia del coronavirus no está bajo control. Usar mascarilla estaba visto en EEUU como algo de demócratas, mientras que no llevarla era un gesto de rebeldía.