Coronavirus
Nueva Zelanda ha sido el primer país que ha puesto en práctica la 'burbuja social', un método que algunos países han comenzado a practicar para recuperar el contacto en la nueva normalidad tras la crisis del coronavirus.
Bélgica fue uno de los primeros países en proponer este método, que consiste en crear 'burbujas sociales' de 10 personas con las que está permitido tener contacto, siempre y cuando las 10 personas acuerden socializar exclusivamente entre sí. No se permitirán burbujas superpuestas.
Según publica la CNN, algunos expertos ven la idea como demasiado arriesgada y prematura, dada la falta de capacidad de muchos países de todo el mundo. Pero algunos sociólogos lo ven como una forma lógica de salir del aislamiento, ya que así se limita a las personas con las que pasa tiempo, y por consiguiente limita las posibilidades de propagar ampliamente el coronavirus.
El próximo 11 de mayo las autoridades neozelandesas reevaluarán si la 'burbuja social' funciona. En este país no tienen límite de gente pero sí son muy estrictos en que tienen que ser siempre las mismas personas y que esas personas no formen parte de otra burbuja diferente. Además las personas en edad de riesgo no pueden participar.
Escocia también estudia poner en marcha esta medida y, en España, ya sabemos que en la siguiente fase las reuniones serán de máximo 10 personas, habrá que ver si siguen este sistema también.