COCHES DE POLICÍA Y BOMBEROS LA ESCOLTARON HASTA EL HOSPITAL
Una pequeña de dos años que lleva desde enero luchando contra un tipo raro de cáncer ha recibido una sorpresa cuando se dirigía, junto a su familia, a su última sesión de quimioterapia.
Mila Martineau fue diagnosticada de un cáncer llamado Rabdomiosarcoma embrionario. Se trata de un tumor maligno de músculo estriado y es más frecuente en la infancia, con una incidencia del 65%. Para detener el cáncer, la pequeña fue sometida a agotadoras sesiones de 'quimio' durante varios meses.
Su madre, Jessica Martineau, explicaba, según recoge un diario de noticias de Boston, WCVB, que esperaban ansiosos que llegara el último día de 'quimio', aunque nunca se imaginó que todo su vecindario se volcara así con su hija. "Han hecho que sea fácil todo este asunto", reconocía ante la prensa.
Mil acudió a su última cita con el médico, como estaba previsto, pero la sorpresa fue mayúscula cuando, varios coches de la policía local y un camión de bomberos, todos con las luces dadas, les escoltaron camino al Hospital. A cada lado de la carretera, sus vecinos, adultos y niños, les despedían con carteles, globos y serpentinas.
Su madre, con lágrimas en los ojos, asegura que se sintió abrumada por tanto apoyo y no dejó de decir que eran "increíbles".