Eslovaquia
Su estado sigue siendo grave y necesita cuidados intensivos.
Tras pasar varios días hospitalizado en estado grave y varias operaciones, la vida del primer ministro de Eslovaquia, Robert Fico, no corre peligro. Así lo ha anunciado el viceprimer ministro eslovaco Robert Kalinak. Fico fue tiroteado en plena calle. El detenido de 71 años se declaró culpable. "Ya no hay peligro inmediato para su vida, pero su estado sigue siendo grave y necesita cuidados intensivos", declaró Kalinak.
Por el momento Robert Fico no será trasladado fuera del hospital de Banska Bystrica. La segunda cirugía de dos horas a la que se sometió Fico para poder extraer tejido muerto de sus múltiples heridas de bala "contribuyó a un pronóstico positivo", según la ministra de Salud, Zuzana Dolinkova.
El atacante consiguió disparar hasta en 5 ocasiones. El exjefe de la policía Stefan Hamran cuestionó el dispositivo y criticó la "reacción tardía" de los guardaespaldas. "En lugar de lanzarse contra el atacante y utilizar incluso sus cuerpos como escudos, intentaron esquivar las balas", defendió.
Fico gobierna el país europeo con un discurso nacionalista, populista, antinmigración y prorruso. Nació el 15 de septiembre de 1964 en el seno de una familia obrera. Se licenció en derecho y con tan solo 25 años comenzó su carrera política en el Partido Comunista.
En 1994 se convirtió en el representante de Eslovaquia ante el Tribunal Europeo de Derechos Humanos. En 1999 -después de que Izquierda Democrática (heredera del Partido Comunista) lo rechazara para un cargo ministerial- creó el partido Smer-SD, dentro del espectro de la centroizquierda.
Dos años después de la entrada de Eslovaquia en la Unión Europea, en 2006, el Smer-SD logró una victoria aplastante. Entonces, Fico fue nombrado primer ministro. En las elecciones de 2010 no logró formar una coalición que le permitiera gobernar a pesar de haber vuelto a vencer.
Ganó de nuevo en 2012 y otra vez en 2016, pero a los dos años se vio forzado a dimitir por multitudinarias protestas contra el asesinato de un periodista de investigación. En octubre del año pasado, y al frente de una coalición nacional-populista, regresó para un nuevo mandato como primer ministro.
Es un socio estratégico de Rusia. Fico admira a Vladímir Putin y también a Viktor Orbán. Sobre el ruso ha dicho que no permitiría su detención en suelo eslovaco por una orden internacional. Y sobre el líder iliberal de Hungría, que "defiende los intereses de su país y de su pueblo".
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