EL BENEFICIADO CUENTA LA EXPERIENCIA
El presidente saliente de Uruguay, José Mujica, recogió la semana pasada con su coche a un hombre que realizaba autostop en una carretera del departamento de Colonia, en el suroeste del país sudamericano, según ha relatado el propio beneficiado. Gerhald Acosta había acudido a trabajar a una fábrica de Conchillas donde trabaja reparando motores, pero al tener la cédula vencida no pudo entrar a trabajar ese día. Un compañero le acercó hasta la carretera y, allí, comenzó a caminar en busca de alguien que le acercara hasta Juan Lacaze.
"Caminé un rato y en ese tiempo pasaron unos 25 o 30 autos y ninguno paró", ha contado Acosta al periódico 'El Observador'. Sin embargo, sí se detuvo un convoy encabezado por un vehículo con identificación oficial. Uno de los ocupantes de un vehículo se bajó y preguntó al autoestopista su destino. "Le dije que iba para Juan Lacaze. Me dijo que me podían llevar hasta Anchorena y que me subiera en la camioneta que estaba adelante", ha explicado.
Al subirse a esta camioneta, reconoció inicialmente a la mujer de Mujica, Lucía Topolansky: "Era Lucía, con la perra Manuela y Pepe venía sentado adelante". Acosta ha asegurado que "no podía creer" que el presidente del país le estuviera llevando.
"El viaje fue corto, pero ellos fueron muy amables", ha destacado, al contar cómo Mujica y su mujer le preguntaron por su situación y le explicaron que iban de camino a su residencia en Anchorena. "No cualquiera ayuda a alguien en la ruta y menos un presidente", ha subrayado.
Su historia se ha hecho popular en Uruguay después de difundiera en su perfil de Facebook varias imágenes tomadas cuando se encontraba en el interior del vehículo. "Al final perdí un día en la fábrica pero valió la pena por la experiencia".