POLICIA BEBE
El oficial de policía de Culver City, Brian Capell, se ha convertido en todo un héroe al protagonizar una hazaña que ha dado la vuelta al mundo. Este agente americano consiguió salvar la vida a una bebé de 9 meses que se estaba asfixiando tras atragantarse con un refrigerio.
La hermana de la pequeña, una niña de 10 años, alertó a la Policía corriendo al ver que el bebé estaba inconsciente. Capell acudió al lugar de los hechos y golpeó la espalda de la niña repetidas veces hasta que recuperó la conciencia y rompió a llorar. En palabras del agente: "fue el grito más hermoso que he escuchado en mi vida".
El agente ha sido condecorado y la familia le está "eternamente agradecida".