Guerra Israel - Hamás
Ya no hay hospitales en Gaza que puedan tratar a un número importante de heridos en caso de ataque. El mayor centro sanitario del sur de la Franja, el hospital Nasser, se ha quedado sin capacidad de atender más pacientes, según Médicos Sin Fronteras.
A la falta de suministros para la sanidad, la población de Gaza verá reducida -todavía más- la escasa ayuda. Cinco países se han unido a la decisión de Estados Unidos y suspenden sus donaciones para los refugiados hasta que se aclare si trabajadores de la ONU participaron en el ataque de Hamás.
Esta situación nos lleva hasta el hospital Nasser, al sur de la Franja de Gaza. Sin suministros y con continuos cortes de luz, la situación hace inviable su funcionamiento. La basura se acumula, ya que sólo queda el 10% de los trabajadores del hospital. Los pocos que quedan, intentan mantener con vida a los 350 pacientes que no han podido ser trasladados y a los que no paran de llegar, tal y como explica el doctor Harara en el vídeo de la parte superior: "Recibimos continuamente pacientes con quemaduras y con heridas graves. Necesitan desesperadamente analgésicos; sólo nos quedan para cuatro o cinco pacientes, puedes contarlos tú mismo".
A pesar del dictamen del Tribunal de La Haya pidiendo a Israel que impida un genocidio, los bombardeos siguen siendo incesantes. Mirvat ha perdido a su hermana y a dos sobrinos en un ataque a una zona residencial de la ciudad de Rafá. "Estaban durmiendo cuando de repente les atacó el misil" comenta afligida.
Mientras, en Israel, el recuerdo a las personas asesinadas por Hamás sigue muy presente. Grupos de turistas acuden al terreno donde se celebraba el festival Nova, el escenario más sangriento de la ofensiva terrorista del 7 de octubre. El conflicto también se expande en otros escenarios. Estados Unidos ha lanzado un ataque preventivo contra los hutíes de Yemen, quienes, a su vez, han logrado impactar un petrolero británico. Por ello, el Reino Unido se reserva el derecho de responder al último ataque de los hutíes.