EN BOSTON | ESTADOS UNIDOS
El enjuiciamiento de los hermanos Scott y Steve Leader por crímenes de odio, como se conoce a los relacionados con la intolerancia y el racismo, fue decidido por un gran jurado en el condado de Suffolk, al que corresponde Boston, informó la Fiscalía.
La imputación de crímenes de odio contra los hermanos Leader, de 30 y 38 años y que se encuentran detenidos desde la noche del 19 de agosto, responde a que "supuestamente golpearon y orinaron a un hombre porque creían que era un inmigrante", informó el fiscal del distrito, Daniel F. Conley, en un comunicado.
Los hechos se produjeron cerca de una parada de metro en el sur de Boston, cuando la víctima, que dormía en la calle, se despertó al sentir que le estaban orinado encima y vio a los hermanos, que luego le propinaron puñetazos y golpes con una barra de metal.
Cuando fueron detenidos, los hermanos Leader, que cuentan con un abultado historial de antecedentes criminales, hicieron comentarios racistas sobre los hispanos a los agentes.
"Donald Trump tiene razón y todos estos ilegales deberían ser deportados", dijo uno de los hermanos, mientras ambos continuaban profiriendo insultos contra los inmigrantes una vez detenidos, según consta en el informe policial.
De ser declarados culpables de las acusaciones de violación de los derechos civiles y causar lesiones a la víctima, los hermanos podrían ser condenados a un máximo de diez años de cárcel.
A los dos acusados también se les imputan los delitos de agresión, ataque con el propósito de intimidación con el resultado de lesiones y empleo de un arma mortal, entre otros. "Los acusados supuestamente patearon, golpearon con los puños y orinaron sobre la víctima, un desamparado de 58 años que estaba durmiendo (....). Uno de ellos tomó una barra de metal y con ella golpeó a la víctima en repetidas ocasiones, y los dos se marcharon del lugar entre risas, según los testigos", informó la Fiscalía.
El indigente, que no ha sido identificado, resultó con la nariz rota y laceraciones en el torso como consecuencia de los golpes, y fue tratado en el hospital Boston Medical Center, agregó el informe.
Ambos acusados se declararon no culpables en su primera comparecencia ante el tribunal del distrito de Dorchester y se les denegó la libertad bajo fianza, por lo que permanecen en prisión desde su detención.
El multimillonario y polémico precandidato presidencial afirmó poco después de lanzar su candidatura que uno de sus objetivos es construir un muro entre México y EEUU y acusó a los inmigrantes mexicanos de ser "criminales" y "violadores".