Pedro Sánchez
Acompañado por la ministra de Defensa, Margarita Robles, visitará la base Miguel de Cervantes.
El presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, ha aterrizado este miércoles en el aeropuerto internacional Rafic Hariri de Beirut para realizar una visita exprés al país, acompañado por la ministra de Defensa, Margarita Robles.
Sánchez tiene previsto reunirse con las tropas españolas que participan en la misión de la ONU en Líbano, con la que busca simbolizar su respaldo a todos los contingentes que España tiene desplegados en el exterior, y en las que han participado este año 10.781 militares y guardias civiles.
Para ello, el jefe del Ejecutivo se desplazará a la base Miguel de Cervantes, situada cerca de la localidad libanesa de Marjayún, donde se ubica un cuartel general liderado por España. Allí, Sánchez tiene previsto hacer un recorrido por las instalaciones, antes de reunirse con las tropas y posar en una foto de familia. Además, firmará en el libro de honor de la base.
España participa en la misión de Naciones Unidas en Líbano desde el año 2006 y en la actualidad hay unos 650 militares desplegados. La mayoría pertenece a la brigada de la Legión "Rey Alfonso XIII", con base en Almería, y que el mes pasado tomó el mando de la operación denominada "Libre Hidalgo". La misión de la ONU en Líbano (FINUL) vigila el cese de hostilidades entre Hezbollah e Israel y acompaña y asiste a las Fuerzas Armadas libanesas en el sur del país.
Es habitual que, coincidiendo con las fechas navideñas, el presidente del Gobierno visite a los militares españoles desplegados en alguna misión en el exterior, aunque la última vez que hubo un viaje de estas características fue en diciembre de 2018, cuando Sánchez se desplazó a Mali para reunirse con los integrantes del contingente español que estaban en ese país.
Investigación sobre la muerte de un casco azul
Hace unos días, el pasado 14 de diciembre, un casco azul irlandés que participaba en la misión falleció por disparos de fuego tras el cerco de una multitud hostil a su vehículo armado. Un suceso en el que también resultó herido en estado crítico otro militar irlandés. La tensión entre las fuerzas libanesas y Hezbollah ha crecido en fechas recientes. Hezbollah es un poderoso grupo armado que cuenta con un brazo político de amplio apoyo en el sur de Líbano. Naciones
Unidas opera en esa zona desde 1978 para mantener la paz en su frontera con Israel.
La grave crisis política y económica de Líbano
A su regreso a Beirut, Pedro Sánchez mantendrá sendas reuniones con el primer ministro libanés, Najib Mikati, que le recibirá en el Grand Serail, su residencia oficial; y con el presidente del Parlamento del país, Nabih Berri. Es probable que durante el encuentro se trate la grave crisis institucional y económica en la que está sumido el país. El sistema financiero colapsó en 2019, con una crisis monetaria que, según Naciones Unidas, ha arrastrado a la pobreza a uno de cada cinco libaneses. La clase política libanesa y el Banco Mundial coinciden en señalar que décadas de dispendio y corrupción están detrás del fracaso económico e institucional. Muchos economistas creen que ésta no hará más que profundizarse mientras no se implementen reformas de acuerdo con el Fondo Monetario Internacional necesarias para que se desbloqueen miles de millones de dólares en ayuda, a lo que se ha comprometido el gobierno libanés. Pese a todo, la presión de la calle a favor de esas reformas, que despuntó en 2019 y creció tras la explosión en el puerto de Beirut de agosto de 2020, ha decaído, y los partidos que han gobernado el país durante décadas mantienen la mayoría de los escaños.
Muchos servicios estatales han dejado de prestarse, se han retirado las ayudas en la mayoría de los casos y decenas de miles de libaneses han abandonado el país en la mayor migración desde su guerra civil (1975-1990).