A LA ESPERA DE UN PUERTO
Los náufragos rescatados y la tripulación a bordo del pesquero de Santa Pola, 'Nuestra Madre de Loreto', están hacinados en el barco y siguen esperando que algún país democrático les permita desembarcar. Los inmigrantes no quieren a volver a Libia pero, por ahora, Italia y Malta se niegan a acogerlos.
El patrón de la embarcación, Pascual Durá, sigue preocupado porque, en su opinión, la gestión del conflicto está siendo muy lenta mientras que los víveres y el combustible van disminuyendo. "Estamos desanimados, no sabemos qué hacer", afirma ante los pocos avances, "Supuestamente vendría una patrullera de Salvamento Marítimo pero no ha aparecido nadie".
Durá subraya que tiene la obligación legal de llevar a los inmigrantes a un puerto seguro y que cumplirá con ella, a pesar de encontrarse en una posición difícil para él. Sin embargo, se muestra descontento con la actuación de Europa ante la situación. Ruega que si las autoridades europeas no quieren actuar en favor de los náufragos rescatados, que lo hagan por los españoles de la tripulación "que estamos aquí tirados y perdidos. Hoy Europa da una auténtica vergüenza. Para los europeos y el resto del mundo, da risa".