DURANTE EL FIN DE SEMANA
Este lunes finaliza la cumbre del G7 que se ha celebrado en Biarritz durante todo el fin de semana y los países participantes no han llegado a ningún acuerdo que vayan a firmar de forma conjunta, evitando así una imagen de división en asuntos tan delicados como el conflicto nuclear con Irán.
El presidente de Francia, Emmanuel Macron, sorprendía invitando al ministro de Exteriores iraní, lo que sirvió, al menos, para relanzar el diálogo entre su país y Estados Unidos.
Por su parte, el presidente estadounidense aseguró que Macron le consultó sobre la invitación al ministro iraní de Exteriores, Yavad Zarif. "Macron me pidió mi aprobación. No lo considero en absoluto una falta de respeto. Le dije que si quería hacerlo, adelante, no hace falta que pidas mi aprobación", explicó Trump, quien recalcó que "estaba al tanto de lo que hacía" el presidente francés, con el que tiene "una gran relación".
Pero este no ha sido el único logro que se ha visto en esta cumbre. Donald Trump anunciaba que representantes del Gobierno de China han expresado su deseo de retomar las conversaciones para encontrar un acuerdo que resuelva las diferencias comerciales entre ambos países. "China llamó por la noche a nuestros máximos responsables comerciales y pidió volver a la mesa de negociaciones, así que volveremos a sentarnos", ha anunciado el inquilino de la Casa Blanca.
Mientras la tensión comercial con China oscilaba con los altibajos verbales del inquilino de la Casa Blanca, este anunció junto con el primer ministro japonés, Shinzo Abe, el final de las negociaciones de un nuevo acuerdo comercial bilateral, aunque parece que de alcance limitado.
Pero el tema que más aceptación ha tenido entre todos los líderes del G7 ha sido la lucha contra los incendios en el Amazonas.
Los líderes mundiales han ordenado desbloquear un fondo de 20 millones de dólares para luchar contra los incendios que han calcinado más de un millón de hectáreas de la Amazonía.