GIRA LATINOAMERICANA DEL PAPA
Una explosión de entusiasmo recibió hoy al papa en la localidad de Caacupé, corazón del catolicismo de Paraguay, cuyas calles se encuentran ocupadas por miles de fieles, entre ellos el presidente paraguayo, Horacio Cartes.
El Papa ingresó en el santuario de Caacupé, donde celebrará una misa, tras llegar en el papamóvil con el que hizo los seis kilómetros que separan el templo del cerro denominado Cruz del Peregrino. En la eucaristía ha destacado el papel de las “mujeres y madres paraguayas” que “han sabido levantar un país derrotado, hundido y sumergido por la guerra”.
A partir de ese punto se agolpaban miles de personas, muchas de ellas argentinas, que saludaron durante todo el trayecto al papa, que, procedente de Asunción, llegó en automóvil a la Cruz del Peregrino. La mayoría de fieles tomó posiciones desde la víspera, al igual que otras miles que se acercaron a Caacupé, tradicional punto de peregrinación mariana de los paraguayos.
El Papa llegó a esa ciudad procedente del hospital pediátrico Niños de Acosta Ñu, en la periferia de Asunción, donde visitó a los 90 menores internos en ese centro. Tras la misa en el santuario de Caacupé, el papa regresará a Asunción para hablar en un polideportivo ante representantes de la sociedad civil.
Al terminar ese evento acudirá a un acto religioso en la catedral para el rezó de Vísperas con miles de personas. Su visita a Paraguay finaliza el domingo con una masiva misa en el parque Ñu Guasú, con lo que cerrará la gira que le ha llevado también por Ecuador y Bolivia.
El viernes, durante su primera jornada en Paraguay, se entrevistó con el presidente paraguayo, Horacio Cartes, y pronunció un discurso en el Palacio presidencial de López.
Francisco es el segundo papa que visita Paraguay, país de mayoría católica, tras el viaje que Juan Pablo II efectuó en 1988